En plena naturaleza y con vistas a las colinas, este antiguo granero, totalmente renovado por el propietario, le ofrece una estancia tranquila, ideal para descansar después de un día de exploración de la región. Las habitaciones están bien decoradas, son amplias, frescas en verano, están bien aisladas unas de otras y cada una tiene su propia entrada privada. (3 noches mínimo)